City of Witches capítulo 157

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 City of Witches capítulo 157 en español

 Redcliffe I

Parte 1

Todo fue bien hasta que Sharon volvió a salir con valentía. 

Hacía sólo unas horas que había terminado su cacería habitual con Siwoo. 

Por otra parte, si las cosas pudieran ir bien si ella pensara “¡Mientras trabaje duro, puedo ganar dinero!”, definitivamente no estaría pasando por este tipo de dificultades. 

“Phew...” 

En la azotea de cierto hospital universitario. El lugar era inquietante y vacío, un marcado contraste con las animadas calles de Sinchon. 

Sentada encima de un depósito de agua, Sharon miraba la brújula con una expresión sombría en su rostro. 

“¿Por qué en momentos como éste no encuentro nada? Es molesto.” 

El aire de la mañana, que al principio parecía fresco, hacía tiempo que se había calentado por el sol abrasador. 

Por el contrario, su ferviente sueño se enfrió. 

Incluso después de dos horas de exhaustiva búsqueda, no encontró nada. 

Se acercaba el momento de enseñar magia a Siwoo, pero la aguja de la brújula seguía girando, ignorando por completo su estado emocional. 

“¿Qué voy a hacer...?” 

¿Esto es porque he estado demasiado relajada últimamente? 

La presión que hacía tiempo que no sentía le pesaba en el pecho. 

¿Y si no encontraba la manera de ganar dinero para pagar sus deudas después de dos meses? 

Aunque la Casa Gemini no vendría personalmente a cobrarle si el pago se retrasaba uno o dos días, debido a su loca cantidad de riquezas... 

Eso no significaba que no se sintiera presionada en absoluto. 

“Bueno, si vinieran en persona, al menos tendría la oportunidad de explicar la situación...” 

Basándose en su experiencia, si el pago del trimestre se retrasaba un poco, tenía que pagar una multa. 

Y el importe de la multa sería casi el triple de la cantidad original del trimestre en curso y ella tenía que pagarlo para el siguiente. 

Era un contrato duro, pero en aquel entonces ella no tenía ni un céntimo, así que no tuvo más remedio que aceptar este tipo de acuerdo de deuda desfavorable para pedir prestada la cantidad de dinero que necesitaba. 

“No permitiré que eso ocurra.” 

Terminó su breve descanso y continuó su camino, pisando ligeramente los árboles para cazar a los Homúnculos. 

“¡Ah!” 

En ese momento... 

¿Se ha hecho realidad mi plegaria? 

De repente, la aguja que giraba sin rumbo empezó a apuntar en una dirección determinada. 

Ella se apresuró a seguirla, saltando mientras avanzaba. 

¡Por fin! ¡He encontrado uno después de mucho tiempo! 

¡Mi millón de won, ya voy! 

¿Esto es lo que se siente al ganar el tercer premio de la lotería? 

Pronto se encontró entrando en la barrera interdimensional creada por el Homúnculo. 

“¡Lindas criaturitas, quédense quietas y allánenme el camino para pagar mis deudas!” 

El lugar era un túnel oscuro y desolado con vías de metro por encima. 

Era un túnel viejo. Debido al nuevo túnel construido al este, se había convertido en un lugar desolado sin tráfico ni gente. 

Con una amplia sonrisa, Sharon saludó al Homúnculo que finalmente encontró. 

Pero, cuando confirmó su identidad, ladeó la cabeza confundida. 

—Creak...creak... 

“¿Otra vez...?” 

Era el Homúnculo con forma de perro negro que ella ya conocía. 

Pero esta vez, eran cinco. 

Había visto algunos antes y esperaba encontrar más en el futuro. 

Pero después de ver este espectáculo, no le sorprendería descubrir que alguien estaba clonando estos Homúnculos por una razón u otra. 

“De todos modos, encantada de conocerlos, chicos.” 

Originalmente, estaba ansiosa por aprender sobre su comportamiento y características, todo sobre ellos. 

Pero, como las cosas se pusieron difíciles para ella, estaba demasiado ocupada lidiando con su problema principal y olvidó por completo su entusiasmo de antes. 

Por otra parte, aunque docenas de ellos la atacaran, ella tenía la confianza suficiente para manejarlos a todos. Para ella, los cinco Homúnculos frente a ella no eran más que dinero andante. 

“¡[Balance]!” 

Sharon movió su varita, ofreciendo el agua de una botella que llevaba consigo como sacrificio. 

Parte 2

La tan esperada cacería terminó sin mucha dificultad.

Lo que daba miedo de cazar a esos Homúnculos era no saber qué clase de hechizos mágicos tenían bajo la manga. 

Después de todo, cada uno de ellos poseía su propia magia única basada en el legado que portaban. 

Bueno, uno no necesitaba preocuparse mucho con los tuertos, aunque había algunos casos raros en los que poseían una magia sorprendentemente poderosa. 

En cualquier caso, la manada de perros no representaba amenaza alguna para Sharon. 

No tenían ningún método de ataque aparte de los ataques físicos y ella llevaba mucho tiempo acostumbrada a sus ágiles movimientos. 

Para ella, derribar a los monstruos que rebotaban como pelotas de goma bajo el túnel era tan fácil como romper una cabeza de pescado en una tabla de cortar. 

“Yay~ ¿Cuánto vale esto~?” 

Se puso en cuclillas bajo el túnel parcialmente derrumbado, secuela de la cacería. 

Tratando de encontrar algunos cristales, rebuscó entre sus restos. 

Como era de esperar, no pudo encontrar ningún legado valioso. 

Aun así, con esto, probablemente podría ganar alrededor de 6 millones de won de golpe. 

Con una sensación de alivio, como si se le hubiera aflojado el pecho, Sharon se echó a reír. 

Pero su sonrisa no duró mucho. 

—¡Tak! ¡Tak! 

El agudo sonido de tacones de un calzado resonando en el túnel resonó en sus oídos. 

A continuación, una voz altiva y prepotente —propia de una bruja— acompañada de un desagradable tono nasal, se dirigió a ella. 

“¿Hmm~? ¿Qué haces aquí?” 

“¿No tienes ojos? Estoy cazando.” 

Antes de siquiera iniciar una conversación apropiada, Sharon ya había sentido que le venía un dolor de cabeza y se puso de pie. 

Allí de pie había una perra envuelta en un vestido rojo— No. Allí de pie estaba Della Redcliffe. 

Desde escuchar el sonido de sus tacones hasta ver el rostro de la propia Della, la expresión de Sharon se torció como la de un niño ante un plato lleno de pimientos picantes. 

“¿Por qué estás cazando aquí?” 

“Obviamente es—” 

Ah... 

Estaba pensando en deshacerse de ella, la fuente de todos los problemas, pero sus palabras hicieron que Sharon examinara su entorno. 

Fue entonces cuando se dio cuenta de que este túnel no era parte de su ruta de patrulla habitual. 

Debido a su desesperada cacería, parecía que había estado tan fijada en su brújula que no se dio cuenta del hecho de que estaba traspasando el territorio de Della. 

A juzgar por su andar arrogante, Sharon no tardó mucho en darse cuenta. 

“¡No, espera! No lo hice a propósito, ¡lo juro!” 

“Tsk, tsk. No sólo eres tonta y patética, también eres una desvergonzada.” 

Observando su estado de nerviosismo, Della entendió rápidamente lo que estaba pasando. 

Si Sharon hubiera sabido que este era el territorio de ella, sin duda se hubiera contenido de siquiera poner un pie aquí. 

Sin embargo, para Della, la emoción de esta divertida captura superó la importancia de la verdad. 

“En nuestro duelo, ¿no prometiste no volver a entrometerte en mi territorio de caza?” 

“...” 

Al ver que Della se acercaba con una sonrisa malvada, como si estuviera encantada de encontrar una debilidad suya, Sharon dio instintivamente un paso atrás. 

Sus ojos como rubíes le dirigieron una mirada extremadamente intimidante. 

Era como si la bruja de rojo que tenía delante fuera una serpiente jugando con su presa. 

“Sí, y no pretendía romper esa promesa. Toma, puedes coger esto.” 

Mordiéndose el labio, Sharon lanzó sus cristales a Della. 

En esta situación, era mejor para Sharon simplemente ceder y evitar entrar en un conflicto innecesario con la otra bruja. 

Sin embargo, eso no significaba que no se sintiera enfadada. 

Después de todo, tenía que inclinarse ante Della, alguien a quien odiaba con cada centímetro de su ser. 

La bruja de rojo cogió los cristales brillantes que le lanzaron con un gesto elegante. 

Tras hacerlos rodar un momento en la palma de la mano, los arrojó despreocupadamente al suelo. 

Al chocar con el asfalto, los cristales se esparcieron en pedazos. 

—¡Whoosh! 

“¿Para qué me sirven esas cosas? Ni siquiera valen nada.” 

Como hacía tiempo que se había convertido en una esclava del capitalismo, Sharon observó con tristeza los cristales destrozados, como si fueran sus propias esperanzas y sueños. 

Entonces, recordó la presencia de Della y desvió la mirada hacia su dirección, sólo para descubrir que la otra bruja se estaba burlando de ella. 

“¿Qué? ¿También piensas recoger las sobras? Cada vez te pareces más a esas pobres brujas.” 

“... Te di los cristales. Si hubiera sabido que este es tu territorio, no habría venido en primer lugar.” 

“Piénsalo. Una ladrona devolviendo lo robado a su dueña cuando la atrapan... ¿Te parece suficiente?” 

Sharon apretó los dientes y desvió la mirada. 

Della era, sin duda, una de las brujas ricas. 

No había rumor alguno sobre ella cazando Homúnculos de tan bajo nivel, así que estaba claro que no los necesitaba. 

Pero, en lugar de dejarla ir por cazar a algunos de ellos, interfirió y la acusó de robar. 

Este tipo de su personalidad retorcida era algo que Sharon no podía comprender en absoluto, aunque no que quería hacerlo en primer lugar 

“Entonces, ¿qué esperas que haga? Como dijiste, soy pobre, no tengo ni un céntimo para darte, así que déjame en paz.” 

Se sentía irritada por toda la situación. 

Mientras intentaba pasar junto a Della, la otra bruja se burló. 

“Bueno, teniendo tú montones de deudas y siendo expulsada de tu propia casa, no soy tan cruel como para aceptar dinero de una pobre mendiga como tú~” 

Sharon intentó ignorar sus inquietantes burlas y continuó su camino, pero algo en sus palabras hizo que sus pies se detuvieran.  

¿Expulsada de tu propia casa?

De repente, todo hizo * clic * en su mente, como si las piezas de un rompecabezas encajaran. 

La sospecha llenó sus ojos entrecerrados. 

“¿... Cómo lo sabes?” 

“¿Cómo sé qué?” 

“Que me echaron de mi casa.” 

“Siempre hay una forma de saberlo, sobre todo cuando te he estado vigilando de cerca. ¿No sabes lo preocupada que estaba por ti, Sharon? Has estado haciendo algo ilegal, después de todo.” 

El desdeñoso encogimiento de hombros y la sonrisa de Della convirtieron la sospecha de Sharon en certeza. 

Su desalojo de su antigua casa estaba innegablemente vinculado a la otra bruja de un modo u otro. 

“¿Quieres que te muestre las pruebas?” 

Sharon le envió una mirada amenazadora, pero ella respondió con una indiferente. 

Ya habían peleado antes y Sharon había perdido, así que sabía más que nadie que era una batalla perdida. 

Sabía que la resistencia era inútil, ya que ni siquiera podía tocar un solo hilo de la ropa de Della. 

“Piérdete.” 

“No. Quiero demostrarte lo mucho que me importas y lo mucho que quiero ayudarte.” 

Della apartó hábilmente el cristal hecho añicos, del piso, con la puntiaguda punta de su taco. 

Rodó hasta que se detuvo a los pies de Sharon. 

“¿Por qué no coges ese poco de dinero? Para mí es una miseria, me lo puedo gastar en una sola copa, pero para ti significa mucho más, ¿no?” 

Ante esta falta de respeto, Sharon sintió que el corazón le hervía de rabia. Apretó la mandíbula con fuerza, luchando por contener su furia. 

Ella apenas no podía entender por qué Della la atormentaba tan implacablemente. ¿Qué clase de rencor tenía contra ella para hacerla hacer algo así? 

Esta perra de mierda... 

Sharon murmuró en voz baja, su ira se negaba a calmarse. 

“¿Sigues sin recogerlo? Puedes ganar un buen dinero con él, ¿sabes? Agáchate y recógelo. Todavía vale más que miles de volantes.” 

“...” 

Sharon apretó la mandíbula y se dio la vuelta rápidamente. 

Se negaba a seguir tratando con esa pedazo de mierda. 

Esa pedazo de mierda no vale mi tiempo y energía, trató de convencerse a sí misma. 

En cuanto a Della, ella se parecía inflexible hacer que se quedara, por lo que no aflojó su provocación en absoluto. 

“Hehe, todavía te preocupas por tu orgullo aunque estés en este tipo de estado patético. Es por eso que estás luchando tanto para pagar tus deudas, ¿sabes?” 

“...” 

“Si al menos hubieras aceptado el trabajo que te iba a dar, no estarías viviendo esta miserable vida. Pobre mujer, tu falta de ideas e ignorancia te ha vencido.” 

Ignorando las palabras de Della, Sharon se repitió a sí misma que debía tomar sus palabras como el murmullo de una perra loca, y que no necesitaba prestarle atención. 

Pero sus palabras seguían volando hacia ella como afiladas cuchillas cortando sus emociones. 

“Tu predecesora debe de estar decepcionada. Después de todo el esfuerzo que puso en encontrar una sucesora, acabó encontrando a una niña inmadura que ni siquiera podía estar a la altura del legado de la marca. Y para colmo, está luchando por gestionar sus deudas por encima de todo...” 

En ese momento, los pasos de Sharon se detuvieron bruscamente. 

Ella había soportado mucho. 

Pero, una persona sólo puede soportar hasta cierto punto. 

“Muy bien, me rindo. ¿Qué es lo que quieres? Dime.” 

Una voz escalofriante reverberó a través del túnel. 

Dentro de esa voz, una rabia insuperable y fervor se filtró. 

“¿Qué es lo que quiero? No quiero nada.” 

Ante eso, Della dejó escapar una risita. 

“Maldita perra. Bien, vamos a por otra ronda.” 

Sharon sacó una larga pipa humeante de debajo de su capa y la mordió con los dientes.