City of Witches capítulo 213

"Leer City of Witches capítulo 213 en español."

 City of Witches capítulo 213 en español

 Protección III

Parte 1

Cuando Deneb y las gemelas se marcharon, la casa, ya de por sí espaciosa, parecía el doble de grande. 

“Se siente como si faltara algo…”

“Cuando pienso en ello, he estado viviendo aquí solo durante mucho tiempo...” 

“No puedo relacionarme con eso ya que nunca he vivido en un lugar tan bueno antes, pero reconozco que era aburrido para ti.” 

Siwoo y Sharon estaban cenando mientras charlaban.

Pero esta vez, en lugar de comer en el comedor como de costumbre, lo estaban haciendo en la sala de estar. 

La razón era que querían ver las noticias sobre los recientes incidentes. 

Además, era un tema candente en internet, ya que si ponían algo en la barra de búsqueda, las primeras veinte búsquedas recomendadas serían algo relacionado con el incidente. 

La magnitud del asunto hizo que Siwoo se preguntara si las brujas podrían realmente encubrir bien el incidente. 

Y para su sorpresa, lo encubrieron. 

Bueno, 'encubrir' no era exactamente la palabra correcta, ya que lo que hicieron fue claramente una manipulación de la información. 

Cambiaron la causa de la muerte de la gente — de ser asesinados por extraños monstruos a explosiones causadas por fugas de gas. 

Todos los supervivientes dieron las mismas respuestas al ser entrevistados, como si lo hubieran ensayado de antemano. Incluso mostraron imágenes de CCTV de personas que morían repentinamente a causa de explosiones cuando estaban en plena compra. 

Culparon a la mala gestión y a las malas construcciones de que esto ocurriera, declarando culpable a la empresa constructora por no respetar las normas de seguridad. 

Después de ver que habían dado órdenes de arresto al director general, al presidente y al representante de la empresa, Siwoo apagó el televisor. 

“...” 

“Siwoo...” 

Al ver que Siwoo mantenía la boca cerrada, Sharon le tomó suavemente la mano. 

“Has hecho lo que has podido. ¿No dijo la Condesa que hay mucha gente que sobrevivió gracias a ti?” 

“Sí, pero aun así me dejó un mal sabor de boca... Supongo que no debería haber intentado verlo mientras comía, ¿huh?” 

Gracias a que la atmósfera se volvió amarga, la cena terminó antes de lo habitual.

Sharon recogió los platos y los llevó a la cocina. Luego, le llamó. 

“Bien, ¿por qué no damos un paseo juntos? De todas formas, quedarte dentro no mejoraría tu humor, ¿verdad?”

“¿Dar un paseo? ¿Adónde?” 

“Al Puerto Incheon.” 

“Claro. Allí tienen almejas buenísimas.” 

Siwoo estuvo de acuerdo con su sugerencia, Además, necesitaba un cambio de ambiente de todos modos. 

Quizás era porque las gemelas ya habían regresado, pero la casa estaba menos animada que antes. 

Y pensó que no había necesidad de compartir su depresión con Sharon. 

“Bueno, conseguir unas almejas a la plancha suena bien, pero ¿sabes que Gehenna tiene un punto de contacto para contrabandistas allí dentro?” 

“¿Huh? ¿Ese tipo de cosas existen?” 

“¡Sí! No siempre están disponibles, pero cada tres meses hay un periodo de tiempo en el que todo el mundo iría y vendría al puerto durante unos quince días, ¿no? Para entonces ya estarán disponibles. ¡Hay muchas cosas que ver allí! Aunque, normalmente no voy allí a menudo, sólo cuando es necesario.” 

“¿Qué tipo de cosas podemos ver allí?” 

Sharon continuó su explicación. Según ella, había lugares así en todo el mundo, y el Puerto Incheon no era un caso único. 

Dijo que, por lo general, los contrabandistas llevaban algunas mercancías procedentes de Gehenna, pero que no siempre era así. De vez en cuando también traían mercancías del Mundo Moderno a Gehenna. 

“¿Entonces, conoces los cultivos mágicos que crecen en el Latifundium, verdad? Las Exiliadas no pueden ir a Gehenna a comprarlos directamente, pero no les hace falta, ya que los contrabandistas los traen aquí. Lo mismo ocurre con otras cosas como herramientas mágicas y demás.” 

“Eso me suena más a un mercado normal.” 

“Pues, ¡funciona como uno!” 

Recordó que había visto cosas parecidas en Ciudad Fronteriza, así que Siwoo supuso que funcionaba de la misma manera que en Ciudad Fronteriza. 

En aquel entonces, recordó su sutil entusiasmo cuando visitó la ciudad, aunque su estado de ánimo general había sido deprimente debido a lo horrible que era su vida. 

Y ahora que tenía la oportunidad de explorarla de nuevo bajo un estado de ánimo completamente diferente, se emocionó visiblemente. 

“De todas formas, gracias a ti he conseguido encontrar una pista sobre cómo restaurar mi marca, así que tendré que visitar el lugar para comprar algunas ofrendas y otras cosas que necesitaría para mi investigación.” 

“Claro, iré contigo.” 

Al oír sus palabras, Sharon se detuvo un momento. 

Golpeó el suelo con los dedos de los pies durante un rato antes de asentir con decisión. 

Parecía que iba a decir algo, pero se detuvo antes de decirlo. 

“¡Bien, prepárate rápido entonces!” 

Pero, como lo dijo sin decir nada más, Siwoo decidió dejarse llevar y seguirla. 

Parte 2

Y así, fueron a Wolmido, Incheon, en taxi. 

Después de bajarse, fueron a un restaurante que servía almejas a la parrilla, comieron hasta hartarse y siguieron su camino. 

Desde la distancia, podían ver grúas que sujetaban enormes contenedores y la parte interior del Puerto Incheon. 

El aire que rodeaba la zona tenía el aroma único del otoño mezclado con el olor salado del mar. 

“Así que dijiste que hay puntos de contacto de contrabandistas por todo el mundo, ¿verdad? ¿Dónde están exactamente?” 

“La mayoría en grandes puertos comerciales, como Incheon y Busan. También sé que hay uno en Yokohama, Jebel Ali, Port Klang y Los Ángeles... pero, eso es todo lo que sé.” 

“¿Y en China? ¿No tienen ninguna allí?” 

“Bueno, el Partido Comunista Chino no se toma muy bien la existencia de brujas. De hecho, apenas hay Witch Point en su país. Realmente no quieren cooperar con las brujas a menos que sea realmente necesario.” 

Aunque las brujas y los líderes de varias naciones habían firmado un acuerdo de cooperación, no tenían ninguna obligación de acercarse entre sí. Esto era lo que ocurría con China. 

“¿Pero de verdad les parece bien? ¿No necesitan la ayuda de las brujas para cazar a los Homúnculos?” 

“Bueno, tienen una población lo suficientemente grande, así que tienen la indulgencia de ignorar los ataques de los Homúnculos mientras el número de víctimas no sea tan alto. Ten en cuenta que las brujas no cazan a esos Homúnculos por obligación o por su sentido de la justicia. Son exigentes, y ni se les ocurriría hacer un movimiento sin una compensación adecuada.” 

Siwoo encontró interesante la disertación de Sharon sobre el asunto internacional de las brujas. 

“Ésta es también la razón por la que las brujas no irían a países del tercer mundo o a países desarrollados que no pudieran pagarles.” 

“Pero, a diferencia de China, esos tipos no tienen la indulgencia necesaria para ignorar esas cosas. ¿Qué les pasaría?” 

“Se crearía un círculo vicioso, supongo. Lo que ocurre es que, aunque una bruja desee voluntariamente establecerse en algún lugar en paz, no iría a países con malas infraestructuras como Bangladesh o Camboya. 

“Como el número de brujas en esos países es escaso para empezar, realmente no pueden soportar todos los ataques de Homúnculos, especialmente cuando éstos empiezan a ser más frecuentes. Con eso, la infraestructura de esos países empeoraría gradualmente, y cuando eso ocurra, menos brujas estarán dispuestas a establecerse allí... 

“Por eso, esos países suelen emplear brujas mediante algún tipo de contrato que dura un periodo de tiempo, como los mercenarios. Por supuesto, incluso eso sigue siendo ridículamente caro para esos países.”  

Siwoo empezó a saber cosas que nunca habría sabido si fuera una persona normal. 

Ahora podía ver lo profundamente implicados que estaban las brujas con el Mundo Moderno, aunque no lo pareciera en la superficie. 

Y cuanto más escuchaba sus palabras, más descubría que brujas y humanos vivían esencialmente de la misma manera. 

“¿Alguna vez has pensado en trabajar para uno de esos países?” 

“Bueno, si trabajo para ellos, entonces estaría obligada a luchar contra todos los problemas que se les presenten. Sólo soy una bruja de rango 17, ese tipo de trabajo es demasiado peligroso para mí.” 

Su respuesta tenía sentido para Siwoo, ya que ni siquiera Yebin, una bruja de rango 19, se atrevía a correr ese riesgo. 

Mientras seguían hablando de esto, a Siwoo se le ocurrió una idea.  

“Bien, ¿qué pasa con esas Exiliadas Criminales? ¿A qué se dedican normalmente? Por ejemplo, Gehenna no los quiere, otras Exiliadas tampoco las quieren, y tienen prohibido usar todos los servicios de Witch Point. ¿Cómo no se van a volver locas después de todo eso?” 

Sabía que sólo había un puñado de Exiliadas Criminales corriendo por el mundo. 

Pero, ¿cómo sobrevivieron esas tipas? Sobre todo teniendo en cuenta lo arraigada que estaba la influencia de las brujas en este mundo. 

Sabía a ciencia cierta que algunas de ellas seguían causando estragos aquí y allá. 

“Bueno, como acabo de decir, las brujas no tienen realmente sentido de la justicia. Cazan Homúnculos porque quieren dinero, y obviamente, el dinero será utilizado para su investigación mágica. 

“Esas Exiliadas Criminales de las que hablas, si aún no han sido capturadas, significa que son las más peligrosas entre las más peligrosas. 

“O son Grandes Brujas o están cerca de serlo. 

“En primer lugar, aparte de la Duquesa Tiphereth, casi ninguna bruja intentaría meterse en peleas voluntariamente. Las brujas fuertes con mucho dinero ni siquiera intentarían cazar a los Homúnculos, y mucho menos a esas Exiliadas Criminales.” 

Por decirlo en términos del juego, las brujas que a duras penas se las apañaban cazando pequeños monstruos no se desvivirían por los jefes de incursión en solitario. 

Claro, el premio sería grande, pero el riesgo sería demasiado alto. 

“Además, esas Exiliadas Criminales tienen su propia forma de hacer dinero, como dirigir un cártel de droga en algún lugar de Sudamérica o cultivar drogas en general. 

“Quiero decir, ellas dijeron que la química tiene sus raíces en la alquimia, por lo que es más o menos todavía dentro de su área de especialidad. Por supuesto, hay algunas de ellas que obtienen beneficios de negocios legítimos también.” 

“Pero, si se enredan demasiado, ¿no vendría la Duquesa Keter a por ellas?” 

Al oír su pregunta, Sharon se limitó a encogerse de hombros. 

“La Duquesa Keter, ¿huh...? ¿Cómo decirlo...? ¿A ella... no le importa mucho? Digamos que después de que volvamos a casa, intentara formar una organización de tráfico de humanos, luego la hago crecer tanto y se convierte en la más grande del mundo. Incluso en esta situación, a menos que anuncie al mundo que soy una bruja, o use abiertamente la magia en el proceso, ella simplemente me dejaría en paz.” 

“¿Pero por qué?” 

“No lo sé. Verás, los únicos momentos en que la Duquesa haría un movimiento es cuando una bruja abiertamente hiciera un gran alboroto en el mundo usando magia y casi revelando la existencia de las brujas. 

“O si hicieran un alboroto tan grande como, por ejemplo, si esa bruja que dirige el cártel en México comprase una planta nuclear y la pusiera en marcha en medio de Ciudad de México. Las Exiliadas Criminales también lo sabrán, así que tampoco buscarán problemas deliberadamente. Lo mantendrán dentro de un nivel razonable.” 

Después de eso, Siwoo pudo enterarse de secretos del mundo que no se contaban en los libros de texto. 

Resumiendo, la razón por la que no se ocupaban de las Exiliadas Criminales era la siguiente. 

En primer lugar, las brujas que aceptaban recompensas y demás no querían ocuparse de ellas porque no eran lo bastante fuertes. 

En segundo lugar, las brujas que eran lo suficientemente fuertes no necesitaban la recompensa, por lo que simplemente no querían molestarse. 

Tercero, no habían causado suficientes problemas como para que la Duquesa Keter interfiriera. 

En cualquier caso, como llevaban un rato caminando mientras hablaban, llegaron a la parte del distrito donde no había edificios alrededor. 

En la carretera había camiones que transportaban enormes contenedores en lugar de coches de pasajeros. 

Cuando entraron en el muelle por una puerta, pudieron ver un montón de contenedores apilados en el suelo, más de los que habían visto en su vida. 

  Se podían ver máquinas de aspecto extraño, levantando y bajando los contenedores mientras decenas de grandes almacenes se alineaban unos junto a otros por todo el recinto.

Las máquinas más impresionantes eran las grúas de decenas de metros que se utilizaban para apilar y descargar las enormes torres de contenedores. 

“Por aquí.” 

Sharon tiró de las mangas de Siwoo, que miraba con curiosidad a su alrededor, y se dirigió hacia el almacén más grande del puerto. 

La verdad es que a Siwoo le preocupaba que algunas personas vestidas con ropa de trabajo les detuvieran antes de que pudieran echar un vistazo, pero no parecía ser el caso. 

Por otra parte, eso significaba que la Caja de Música seguía funcionando correctamente. 

Nadie siquiera les dedicó una mirada. 

Mientras se dirigían lentamente hacia el interior, atravesando el espacio entre contenedores, Siwoo pronto se dio cuenta de que no había más gente a su alrededor. 

Ni siquiera se oían ya los ruidos de la maquinaria pesada. 

De repente, un gran almacén, que sobresalía por encima de los demás, apareció frente a él. 

Puede sonar un poco gracioso, pero Siwoo pensó que esto debía ser lo que se sentía al ser secuestrado por una bruja, como en esos libros de cuentos que solía leer de niño. 

“Me preguntaba por qué estabas tan despreocupada por todo esto, así que es así, ¿huh?” 

“Bueno, aunque éste es el lugar donde se reúne toda la gente, y no les importaría compartir el espacio, eso no significa que construyeran este edificio a la intemperie, donde todo el mundo pudiera verlo.” 

“Por lo que sé, utilizaron líneas ley, vetas de agua y la disposición de los contenedores como medio para esparcir su maná y ocultar el lugar. 

“Para llegar aquí, hay que doblar en la esquina correcta en el lugar correcto, para que la gente no tropiece con el lugar por accidente.” 

“Eso es interesante.” 

“¿Verdad?” 

La razón por la que no encontraron a nadie vigilando el almacén fue probablemente por la ocultación. 

Después de eso, la pareja abrió la puerta y entró en el punto de contacto del contrabandista.