Hazure Waku Capítulo 284
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Hazure Waku capítulo 284 en español
Esto es un poco…
Pocos días después de la partida
de Yasu Tomohiro— había llegado el momento de partir para nosotros, el
escuadrón Rey Mosca.
“N-Nyaki... ¡está deseando
volver a ver a todos sanos y salvos nya...! También, también, cuando el
Maestro-san y los demás hayan terminado su viaje...”
Nyaki se quedaría aquí en el
País Lejano.
Al oír sus palabras, me
arrodillé y la miré a los ojos...
“Sí. Haré que te reúnas con Liz
entonces.”
“¡Sí nya!”
“Tendremos que ir a decirle a
Neenya y a tus hermanas menores que Nyaki está a salvo después de todo.”
“¡Sí!”
Nyantan Kikeepat.
He transmitido la descripción
física de Nyantan hacia Mira.
Ella es la familia de mi
camarada.
Por lo tanto, les dije que si
llega un momento en que tendrían que luchar contra ella, no deben matarla.
Sin embargo — aunque diga que no
deben matarla…
Sería difícil para ellos ser
completamente minuciosos.
Al igual que fui incapaz de
ocultar la existencia del Rey Mosca en esa batalla anterior...
No hay absolutos.
Sin embargo, espero que hagan lo
que puedan.
A pesar de las circunstancias,
mientras Nyantan sea uno de los apóstoles de Vysis... no hay garantía de que
todo termine en un final feliz.
“Por supuesto, si la veo en el
camino, me aseguraré de hacérselo saber.”
“¡Muchas gracias nya! Pero,
pero...”
“¿Hmm?”
Nyaki todavía tenía una sonrisa
en su rostro.
Sin embargo, apretando los ojos,
había gotas de lágrimas en la esquina de sus ojos.
“Nyaki entiende nya. Mientras
Neenya esté del lado de la Diosa-sama, no hay garantía de que puedas
encontrarte con ella pacíficamente nya. Por supuesto, Nyaki se alegraría si
pudiera reunirse con Neenya de nuevo a salvo... Pero me disculpo si causo
problemas al Maestro-san y a los demás nya...”
Interiormente dejé escapar un
suspiro.
Es porque ella dice estas
cosas...
Es porque ella puede ser así de
objetiva...
Es porque prioriza a los demás
antes que a sí misma...
Que me hace querer darle a Nyaki
lo que desea aún más.
“... Tienes razón. No hay
garantía que eso pueda suceder. Sin embargo, haré lo que pueda — después de
todo, no eres sólo un extraña para nosotros.”
“Maestro-san... decir eso sólo
por Nyaki.... Nyaki es... Nyaki es...”
Ya sea Liz o Nyaki...
Ya han pasado por mucho.
Las dos... igual que a mi
"antiguo yo" ....
Si no las salvo adecuadamente,
no estaré satisfecho.
¿Quién saldría ganando si ellas
dos fueran salvadas?
Sería yo.
Si puedo conseguirles un futuro
en el que ambas puedan sonreír...
… me sentiré un poco mejor.
“¡Yo... entiendo nya!”
“Ellos también... estarán
tristes de separarse de Nyaki después de todo.”
“¡Pinyuu~~! ¡Poyooooon!”
“¡Pakyuu~~!”
Pigimaru, que saltó de mi
túnica, y Slei corrieron hacia Nyaki.
Sin más, Pigimaru y Slei se
aferraron a ella.
“Pyurii~~...”
“Pakyuuu~~...”
De pie, contemplé tal escena.
Desde que llegamos al País
Lejano, se han vuelto especialmente unidos.
… Quizás sería mejor que les dejara
verse al menos una vez más antes de la batalla decisiva.
“Pigimaru-san y Slei-san
también... ¡Nyaki está deseando volver a verlos nya! ¡U-Ustedes dos son mis
amigos después de todo!”
“Pigiii
“Pakyuu
Mirándolos a los tres así, Seras
se inclinó silenciosamente cerca de mí y me susurró al oído.
“Hagamos también todo lo posible
para que puedan reencontrarse a salvo.”
Al oír lo que dijo, resoplé.
“Eso es obvio.”
◇◆◇
“—Entonces, cuento contigo.”
Dijo Liese, de pie, delante de todos. Frente a la puerta — la entrada al País
Lejano.
Hace unos días, éramos nosotros
los que despedíamos a la gente.
Hoy, sería el que sería
despedido.
Había más gente de la que
esperaba que nos había despedido.
Todas las Siete Luces de Guerra
estaban aquí.
El Cerberus Roa también estaba
aquí.
Además, estaban los soldados de
cada cuerpo del ejército...
También había muchos monstruos.
Ya sean los Kobolds, que nos
recibieron con cautela cuando llegamos.
Lobos gigantes.
Había muchos monstruos que
lucharon con nosotros en la batalla anterior.
Viéndolos así, sentí que mis
conocidos habían aumentado.
En ese momento, el Rey Zect
sostuvo mis dos manos.
“Mi incompetencia te ha metido
en problemas... Lo siento, y te lo agradezco desde el fondo de mi corazón.”
“Yo también quiero darte las
gracias.”
Cuando el Rey dio un paso atrás,
Gratora se adelantó e hizo una reverencia.
“Ahora, ya confío en ti. No
porque el Rey confíe en ti, sino porque yo misma confío en ti… Por favor,
cuídate.”
Después de que asintiera en
respuesta, las Cuatro Luces de Guerra dieron un paso al frente.
“Tengo fe en tus habilidades...
Así que cuento contigo, Rey Mosca. Contigo a la vista... me esforzaré por ser
más sabio y más fuerte.”
“Sí, hazlo lo mejor que puedas.”
“¡Umu! ¡Niko lo hará lo mejor
que pueda! —Ah, no... ¡Erhem! Espero que regreses a salvo.”
La siguiente persona en salir
después de Niko fue Qir.
“Qir-sama aquí presente, se ha
convertido de repente en algo así como una estratega militar… Necesito aprender
más sobre estrategias y tácticas. Me hubiera gustado aprender más de ti,
Seras-kun.”
“Mis disculpas, Qir-dono.”
Al oír los gruñidos de Qir,
Seras soltó una risita.
En respuesta, Qir sonrió y se
encogió de hombros.
“Cielos~~ Realmente eres
demasiada seria. Sin embargo, cuando vuelvas y tengas algo de tiempo libre, por
favor, enséñame mucho sobre ellos, ¿okay?”
“Sí.”
“Fufu, a cambio... Onee-san te
enseñará un montón de cosas
“Hahaha...”
“¡Cielos! ¡Sabía que Seras-kun
tendría una cara como esa! ¡Eres demasiado predecible!”
Cuando las palabras de Qir
hicieron que todos estallaran en carcajadas, el ambiente se relajó.
En ese momento, Armia se acercó
lo suficiente para hablar en privado.
“Esas dos seguro tienen una
buena compatibilidad, unnn.”
“No creo que nuestra
compatibilidad sea mala tampoco.”
“Unnn, no lo negaré.”
Esta Caballero Lamia es
sorprendentemente buena en la observación objetiva.
Mientras la humilde Seras era
rodeada por Qir y los demás, Armia los miró.
“Te agradezco que hayas acompañado
a Munin-dono esta vez. Es sólo que, bueno... Tendremos que ser fuertes por
nuestra cuenta. No podemos seguir dependiendo de ustedes para superar las
situaciones. Tenemos que tomar nuestras propias decisiones y gestionar nuestro
propio país. Nuestra situación se ha convertido en una carga imprevista en tu
viaje, ¿verdad?”
Seras, Munin y Slei se despedían
uno tras otro.
Mirándolos desde lejos...
“Lo asumí por razones
personales, pero si tuviera que hablar de mis verdaderas intenciones… supongo
que realmente no lo sé. Tal vez, realmente podría ser sólo un blandengue
amable.”
“Fufufufu... No sé si eres buena
o mala persona, pero probablemente eso sea parte de tu encanto.”
“Bueno, podría ser mejor si tú y
Gio apoyan a Liese en las relaciones diplomáticas por el momento. Ambos fueron
rápidos hasta en esas áreas.”
“Dejándome de lado… creo que
Gio-dono es propenso a ser de sangre caliente, unnn.”
“Puedes poner tus puntos fuertes
a tu favor. Si tienen demasiada gente, puedes luchar contra ellos 'de esa
manera'.”
“Puedo oírte, Armia.”
Avanzando desde el lado de Armia
estaba Gio Shadowblade.
Junto a él venía su esposa,
Yerma.
“¡Oh, si es Gio-dono! ¡Ay! Ya me
has oído, ¿de qué estás hablando?”
“... Estás haciendo eso a
propósito, mujer serpiente.”
“¡Vaya, Gio! Como Armia-san
señaló, ¿no te estás poniendo ya de sangre caliente?”, le regañó Yerma.
Al oír a su esposa, Gio chasqueó
la lengua y se rascó la cabeza, antes girar su atención hacia mí.
“Culpa mía. A pesar que fue
suficiente de la ayuda de la pelea del otro día... En este caso, prácticamente
te hemos obligado a la diplomacia con Mira.”
“La diplomática fue puesta en
manos de Munin sin embargo.”
“No creo que ese Emperador de
aspecto extremadamente pulcro piense lo mismo.”
Este Leopardkin de pelaje negro
realmente tiene un agudo sentido de la perspicacia.
“Es como dije antes. Soy así de
blando.”
“... Mantendremos nuestros
colmillos afilados. Si alguna vez necesitas nuestra ayuda en el futuro, no
dudes en decírnoslo.”
“Sí, contaré con ustedes cuando
llegue el momento.”
Realmente puedo contar con la
fuerza de Gio y el Ejército Leopardo de la Luz.
Tener tal intercambio entre
nosotros — la hora de partir finalmente se acercaba.
Llamé a Munin, que había
terminado de despedirse.
“¿Terminaste de despedirte de
los otros miembros de la Kurosaga?”
“Sí. En primer lugar, teníamos
algo de tiempo antes de irnos, así que ya me ocupé de las cosas que podrían
pasar tras mi marcha y me despedí de ellos.”
“Ya veo.”
“Munin.”
“Ara~, Fugi.”
Una chica de cabello plateado
tiró de la manga del vestido de Munin y la llamó.
Cuerpo esbelto.
Cabello corto.
Ojos un poco felinos.
Se podría decir que es una
belleza.
Sin embargo, su expresión no
cambia mucho al expresar sus emociones.
Mirando hacia Munin...
“Ten cuidado ahí fuera.” Dijo
Fugi sin emoción, a lo que Munin la abrazó.
“No te preocupes. El muy fuerte
Rey Mosca y su grupo están conmigo después de todo.”
“Estaré esperando.”
Fugi entonces me miró.
“Por favor cuida de Munin.”
“Sí.”
El otro día, conocí a Fugi
cuando visité la aldea de Kurosaga.
Ella es la otra persona capaz de
usar las Maldiciones Prohibidas.
Entonces, Munin puso suavemente
su mano en la mejilla de Fugi.
“Estarás bien sin mí, ¿verdad?”
“Haré lo que pueda.”
“Fufu, eres la Fugi de la que
estoy tan orgullosa después de todo.”
“Yo también estoy orgullosa de
ti, Munin.”
Para los espectadores, eran como
madre e hija.
Sin embargo, no están
relacionadas por sangre.
Por así decirlo, Munin es su
madre adoptiva.
Los padres de Fugi murieron de
enfermedad cuando ella era pequeña.
Así que Munin ha estado cuidando
de Fugi desde que era muy pequeña.
Aunque no tengan lazos de
sangre, las considero "madre e hija".
Los lazos de sangre no son lo
único que forma una familia.
Por mi propia experiencia— lo sé
muy bien.
“......”
Sólo un poco...
Mirarlos, el sólo un poco...
… me dieron ganas de ver a mis
tíos.
Por un momento, ese pensamiento
cruzó mi mente.
Pero en ese momento...
“... Belzegia.”
Liese me llamó tímidamente.
“Voy a hacer todo lo posible
para finalizar completamente las negociaciones con Mira.”
“También, en cuanto al Gran
Tesoro—”
“Lo sé.”
El Gran Tesoro de Mira.
Liese y los otros también tenían
algunas cosas que querían en él.
“Errr... Lo siento. Debería
haber sido yo la que fuera...”
Al principio, Liese estaba muy
entusiasmada con la idea de "ir allí también".
Sin embargo, ahora que se ha
tomado la decisión de formar una alianza y las negociaciones estaban avanzando—
—para que las cosas avanzaran a
nivel nacional, le esperaba una montaña de trabajo.
De cara al futuro, el País
Lejano debe sentar todas las bases posibles.
“La gente que queda aquí también
tiene cosas que hacer. No es que puedas holgazanear. Es sólo que te he asignado
al papel más adecuado para ti.”
“Lo sé, pero...”
“Como dije, tenemos que ir a
Mira por otras razones de todos modos. Si podemos lidiar con eso mientras
estamos allí, es mejor.”
“... Tienes razón. De hecho, es
como dijiste.”
Dejando salir una sonrisa
agotada, Liese soltó un suspiro y bajó los hombros.
“En tiempos como estos, la
racionalidad debe prevalecer sobre las emociones, ¿cierto?”
“El Emperador Loco también
parecía un oponente problemático con el que lidiar.”
Sus cejas se fruncieron, antes
de sonreír amargamente, como si admitiera la derrota.
“Tienes razón... Es frustrante,
pero no creo que mi yo actual hubiera sido capaz de competir con alguien como
tú.”
“... De alguna manera, te has vuelto
realmente honesta, ¿no?”
“¡¿Ughh?! ¡¿Eso es malo?!”
“Lo contrario.”
“¡Bueno, gracias! ¡... Diablos,
cuál es tu problema! En serio, realmente eres—”
Mientras miraba a Liese chillar
esto y aquello con su rubor hasta las orejas...
“Estoy seguro que habría sido
divertido viajar con Liese.”
“¡—Pero bueno! ¡Supongo que esa
parte de ti! es algo que yo r-reconozco— ¿... Hmm? ¿Qué acabas de decir?”
Aunque digo que...
“No, no he dicho nada
importante.”
Dejando de lado a Munin, que se
unió al Escuadrón del Rey Mosca por venganza...
Al igual que Nyaki— este viaje
de venganza no es adecuado para Liese.
“Ahora entonces.”
Miré hacia la puerta.
Nyaki, la llave, ya estaba
esperando junto a ella.
Bueno, cómo debería decir
esto...
“Creo que ya es hora de partir.”
Para mí, cuyo único propósito es la venganza — esto se siente un poco demasiado caliente.