City of Witches capítulo 242

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 Reembolso III

Había pasado una semana desde el incidente. 

Fue después de que Siwoo terminara su entrenamiento con Eloa en medio de la plaza Gwanghwamun. 

Él se acariciaba el cuerpo dolorido. 

El contenido del entrenamiento era el mismo de siempre, sparring uno contra uno. 

Pero, a petición suya, hicieron un pequeño cambio. 

Como su nombre indicaba, el “Pacto de Dominio de Miríadas de Armas” era una magia de autoesencia que aumentaba la eficacia en el manejo de las armas. 

Hasta ahora, había aprendido a mover su cuerpo y a utilizar su maná para mejorarlo, así que ahora era el momento de empezar a entrenar empuñando armas, principalmente espadas, lanzas y escudos. 

Como era de esperar, entre el sparring de esta vez y el que habían estado haciendo, había claras diferencias, pero la principal sería su intensidad. 

Cada vez que Siwoo acababa de colocar su armadura, Tiphereth la destrozaba inmediatamente antes de empezar a aporrear su cuerpo indefenso. 

En comparación con antes, ella estaba menos relajada y parecía tomarse el combate más en serio. 

“Haah.. qué locura…” 

Después del sparring, se dio una ducha. Actualmente, estaba de pie frente al espejo, mirando el estado de su cuerpo. 

Sus mejillas hinchadas y rojas y varias marcas rojas en su cuerpo representaban la intensidad del entrenamiento de hoy. 

En todo caso, ahora estaba mejor que antes ya que Eloa le había aplicado magia curativa ligera. Sin ella, tendría las mejillas ensangrentadas y marcas azules por todo el cuerpo. 

“Sé que lo busqué, pero… Uf, duele...” 

Su tiempo de entrenamiento habitual, que duraba hasta doce horas, se redujo efectivamente a cuatro horas. 

Pero, el entrenamiento se hizo considerablemente más intenso que antes. 

De hecho, si se miraba desde la perspectiva de una persona normal, el entrenamiento era simplemente absurdo. 

Para darle más impacto, Siwoo aumentó el peso de su armadura a 100 kg y el de todas las armas que utilizaba a 30 kg. 

Incluso si no se tuviera en cuenta el peso, un luchador profesional de MMA seguiría agotándose si se le lanzara a un cuadrilátero para luchar durante cuatro horas. La única razón por la que Siwoo podía durar tanto era por su cuerpo espiritual y su magia. 

Miró el reflejo de su cuerpo en el espejo. 

Incluso durante su época de esclavo, ya tenía una musculatura bastante tonificada debido a todo el trabajo, pero después de obtener su cuerpo espiritual, su musculatura se volvió aún más tonificada y firme que en ese entonces. 

Cada vez que se detenía a observar su cuerpo, se daba cuenta de que había traspasado el límite del cuerpo humano y había entrado en las filas de la trascendencia. 

Por supuesto, no tenía el deseo de hacerlo, pero si quisiera, podría convertirse en una amenaza a nivel mundial para el humano común y corriente. 

Las armas de fuego no podrían atravesar su armadura, los proyectiles de los tanques no podrían perforar su escudo. 

Podría atravesar cualquier bombardeo lanzando su lanza de sombra, y podría derribar fácilmente cualquier tipo de fuerza aérea usando sus cintas. 

Si las cosas se ponían peligrosas para él, siempre podía huir usando el [Cambio de Dimensión]. 

Un misil tomahawk podría darle algún problema, pero si estaba decidido a bloquearlo, no le supondría ningún problema. 

“Tal vez pueda ganar incluso contra Ironman.” 

Siwoo, que estaba pensando en tonterías como hacen todos los hombres normales siempre que tienen tiempo libre, salió del baño empapado mientras sólo llevaba puesta la ropa interior. 

Pero lo que debía hacer era ponerse algo de ropa antes de salir. 

Porque Eloa, que se fue un rato después del entrenamiento, ya había regresado y estaba sentada en la sala de estar. 

“...” 

Eloa, que estaba sorbiendo su té, se convirtió en un conejo asustado mientras sus ojos se abrían de par en par. 

Sin embargo, mantuvo la compostura y dejó la taza en la mesa antes de soltar una serie de toses. 

Tal vez se debiera a la luz del sol que se filtraba a través de la cortina rosada y caía sobre sus mejillas... 

Sus mejillas ardían de un rosa brillante, del mismo color que su cabello. 

Pero consiguió disimular su nerviosismo y habló con su habitual voz severa y reservada. 

“¿Cómo te encuentras? Pensé que hoy había sido demasiado dura contigo, así que volví para ver cómo estabas.” 

“Como puedes ver, estoy bien. Aunque me siento mal porque hoy no pude volver a tocar el dobladillo de tu camisa.” 

“Pero, estabas sangrando.” 

“Fui yo quien te lo pidió. Además, estoy mejor gracias a tu tratamiento.” 

Él sacudió los hombros en tono de broma. 

No es que Eloa no permitiera que la golpeara. 

Más bien, ella se las arregló para bloquear cada golpe que él le lanzó. 

Ella captó todos las aperturas que él mostró e interceptó sus golpes sin falta. 

Aun así, le hizo sentir como si estuviera luchando contra alguien que podía ver el futuro. 

“Entiendo tu deseo de ponerlo todo en el entrenamiento, pero no puedes dejar que la codicia supere tus sentimientos, ¿okay? No te precipites, da un paso cada vez. Notarás una gran diferencia cuando lleves un buen ritmo.” Dijo ella con una sonrisa amable. 

Si bien ella era despiadada en el entrenamiento, una vez que terminaba, siempre se desvivía por animarle así para que no se desanimara. 

Pero hoy, parecía que su mente estaba en un lugar diferente. 

Era como si no quisiera mirarlo. 

“Ah...” 

Siwoo se puso rápidamente la ropa que había colocado en el sofá. 

Sólo entonces Eloa lo miró con atención.

Sin embargo, la forma en que intentaba ocultarlo era bastante graciosa.

“Por cierto, hay algo que me vino a la mente... ¿Puedo preguntarte sobre eso?” 

 “Pregunta lo que quieras.”

Y así, él preguntó la cosa por la que tenía curiosidad. 

“Durante nuestro sparring de hoy, ¿cuánta de tu fuerza usaste?” 

“¿Cuánto de mi fuerza? Hmm...” 

Esa pregunta la hizo perderse en sus pensamientos por un rato. 

“No es una pregunta fácil de responder. Varía dependiendo del lapso de tiempo.” 

Al cabo de un rato, volvió a abrir la boca. 

“Pero, en general, debería rondar el 5%.” 

Sólo eso. 

Él esperaba que ella le hubiera mostrado al menos el 10%, pero la verdad le decepcionó. 

Por otra parte, ella era una bruja de rango 23, un rango que no cualquiera podía alcanzar. 

Más que decepción, sintió admiración por ella. 

“Pero eso es sólo si incluyo mi maná y demás. Como no usé ninguno de ellos y sólo he estado usando mi habilidad con la espada y las artes marciales, debería ser alrededor del 50%.” 

“¿Huh? ¿Tanto?” 

Eso lo sorprendió de una manera diferente que antes. 

Si sus palabras eran ciertas, eso significaba que cuando se trataba estrictamente de técnica, él ya estaba a medio camino de alcanzarla. 

“El poder del pacto dentro de ti es poderoso. Dentro de él está la acumulación de cien años de práctica y experiencia. Ahora mismo si empuñas tu arma, incluso sin usar magia, ningún humano podría desear igualarte.” 

“Ya veo...” 

“Puedes levantar un poquito más el pecho.”

Eloa se levantó y caminó delante de él. 

Tras un breve momento de vacilación, pareció decidirse, alargó la mano y le dio una ligera palmada en la cabeza. 

Aunque fue una escena bastante graciosa debido a la diferencia de altura entre ambos, el ambiente seguía siendo bastante cálido. 

“Quédate quieto.” 

Mientras le movía la cabeza de izquierda a derecha, sus ojos empezaron a brillar con una suave luz. 

Como acababa de salir del baño, Siwoo no llevaba el parche en el ojo, así que pudo ver una fórmula mágica formada por figuras de aspecto complicado con su ojo izquierdo. 

La fórmula mágica tenía la forma de un octagrama, numerado por centenas, entrelazadas creando una especie de cadena. 

Ambos extremos de la cadena se colocaron en sus pechos. 

“Por la presente, declaro un pacto.” 

Mientras murmuraba en voz baja, él sintió un cosquilleo en el dorso de la mano y una sensación extraña en todo el cuerpo. 

Cuando echó un vistazo al dorso de su mano, había un dibujo que parecía un reloj de arena, llevándose a una sorpresa. 

“¿Qué es esto?” 

 “Un pacto simple, un pacto defensivo que se activaría si tu vida está en peligro. Además, el pacto me permitirá conocer tu ubicación.”

La magia de pacto de Eloa era algo que podía establecerse con palabras. 

Por lo tanto, su uso era infinito. 

Desde evitar que alguien mintiera, mejorar el cuerpo de alguien, incluso rastrear la ubicación de un objeto. 

Y de las doce ranuras del pacto que podía utilizar, dedicó uno de ellos para él. 

“Gracias, esto realmente me ayudará.” 

“No importa lo fuertes que sean tus adversarios, sólo tienes que aguantar un minuto, para entonces podré salvarte.” 

Le acarició la cabeza por última vez antes de prepararse para marcharse. 

“¿A dónde vas?” 

“Voy a buscar a la Bruja Cobarde. Debería estar cerca, así que pensé que le diría lo que pienso.” 

El tono de su voz al decir eso estaba lleno de una resolución y una ira calmada que se sintió inquietante para Siwoo. 

No sabía cuán fuerte era exactamente la Bruja Cobarde, pero creía que Eloa era lo suficientemente fuerte como para enfrentarse a ella. 

“Hasta luego.” 

Cuando se dio la vuelta y se disponía a caminar hacia el ascensor, Siwoo la llamó. 

“Maestra.” 

Cuando lo oyó, ella se detuvo. 

Sintió como si sus orejas, que sobresalían por debajo de su cabello, se erizaran un poco. 

Se dio la vuelta de nuevo y le miró fijamente. 

Sus mejillas estaban hinchadas de alegría, como si estuviera conteniendo una sonrisa. 

“¿Me llamaste?” 

En realidad, había estado actuando así siempre que él la llamaba “Maestra”. 

Y aunque era un pensamiento audaz, a él siempre le parecía linda su reacción. 

A diferencia de su habitual actitud brusca y seca, parecía un animal pequeño, así que de vez en cuando la llamaba así sólo para observar su reacción. 

Y como era de esperar, su reacción no traicionó sus expectativas. 

“¿Por qué no vamos a comprar ropa juntos la próxima vez?” 

“¿Comprar... ropa...?” 

Ella sólo usaba dos tipos de ropa. 

La combinación de sujetador deportivo + pantalón de entrenamiento + cortavientos que le colgaba del estómago. 

O el vestido blanco liso sin ningún adorno. 

Él no pensaba que ella fuera fea en ambos casos, pero supuso que probablemente sería bueno que se arreglara un poco. 

“Hay unos grandes almacenes cerca, así que es perfecto. Vamos allí más tarde, te compraré algo de ropa.” 

“¿Qué te pasa de repente? ¿Mi ropa se ve rara?” 

Eloa tenía una expresión de perplejidad en la cara. Igual que alguien que pensara “¿Huelo mal?” al recibir un perfume de regalo. 

“No, pero ya sabes, ya ha cambiado la estación, así que he pensado que deberíamos ir de compras.” 

“Ah, ya veo. Claro, hagamos tiempo para eso.” 

Después de eso, ella se despidió de él una vez más con un vivir y andar más emocionado que antes. 

Luego, ella desapareció en el ascensor, dejando a Siwoo y a Sharon solos en la habitación que era tan grande como una mansión. 

Cuando se acercó a ella, notó que dormía tan tranquilamente que ni siquiera podía oír su respiración. 

Igual a una muñeca.

Tal vez ahora estaba librando su propia batalla. 

Le acarició la frente como de costumbre antes de sacar una tarjeta de presentación del bolsillo. 

Había llegado el momento de saldar su deuda con aquella persona. Todo este tiempo había estado distraído y había decidido centrarse en el entrenamiento, pero ya no podía entretenerse más. 

Pero para ello, primero tenían que reunirse. 

Mientras miraba la tarjeta de presentación, que sólo tenía un nombre y un número de teléfono, hizo una llamada. 

[He estado esperando.] 

Antes de que el tono sonara ni una sola vez, Periwinkle ya había contestado a la llamada. 

[Ha pasado una semana desde ese entonces. ¿No crees que llegas un poco tarde?] 

Lo que llegó del otro lado de la llamada fue una tranquila reprimenda. 

“Lo siento, tenía muchas cosas de las que ocuparme.” 

[Está bien. No quería reprenderte. De todos modos, nos vemos hoy.] 

“¿Puedo saber cuál es la petición que necesito escuchar?” 

[¿Por qué no lo hablamos después de reunirnos?] 

“De acuerdo.” 

[Estaré allí pronto, no está lejos de donde estoy actualmente.] 

Así de simple, la llamada se cortó. 

Aunque le había salvado la vida, parecía que no iba a pedirle nada prepotente y tampoco parecía mirarle con condescendencia. 

Pero eso era sólo lo que él pensaba, ya que Periwinkle podría tener algo completamente diferente en mente. 

Parecía que, en la sociedad de las brujas, pagar una deuda de gratitud era algo importante. Teniendo en cuenta que ella le había salvado la vida, no era algo que se tomara a la ligera. 

Tal vez esto se debía a su naturaleza de bruja, ya que podían vivir por la eternidad siempre que lo desearan, e incluso si no lo hacían, su nombre y marca aún podían ser heredadas a otra persona. 

Con eso en mente, Siwoo se puso su ropa de salir y fue a reunirse con Periwinkle.