Hazure Waku capítulo 403
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Hazure Waku no "Joutai Ijou Skill" de Saikyou ni Natta Ore ga Subete wo Juurin Suru Made |
Seguramente fueron Regalos De mi Padre Y mi Madre
Ars busca batalla.
Este Sirviente Divino no perdona a aquellos que dan la espalda a la batalla.
Ars los consideró un oponente digno.
En cierto modo, tal vez esa fue su desgracia.
◇◆◇
Yo corría por los pasillos del laberinto con Gio.
Ahora mismo, Ars estaba unos 30 reters detrás, persiguiéndonos.
Habíamos intentado adelantarnos unas cuantas veces, pero tras una breve defensa, cambiamos de dirección y de alguna manera conseguimos escapar.
“¿Estás bien, Gio?”
“Hahh... hahh... Parece que serías más rápida que yo en una carrera...”
“Has recibido una herida grave... En situaciones como esta, debería ganar algo de tiempo.”
Me concentré en escuchar con atención. Podía oír débilmente los pasos de Ars.
Aun así, las pisadas generalmente son absorbidas por las paredes.
Por lo tanto, tuve que seguir comprobando la posición de Ars con la vista.
Volví la mirada al frente.
Poco a poco.
La brecha entre nosotros y Ars se estaba cerrando.
La fuerza de ese Sirviente Divino... ¿Es proporcional a “la fuerza de nosotros dos”...? Si ese es el caso... Si dejo que Gio escape primero y me enfrento a él sola ——— ¿volverá a tener la fuerza que tenía cuando se enfrentó a mí? La fuerza que tenía cuando lo encontré por primera vez...
Si ese es el caso...
Si me quedo atrás para ganar tiempo, tal vez pueda sacar al herido Gio primero...
Gio, todavía recuperando el aliento...
“No sé cómo te sientes exactamente responsable, pero ni se te ocurra quedarte atrás y ganar tiempo, ¿entendido?”
“Pero... si mi suposición es correcta, esa sería la mejor manera de ganar tiempo.”
“Incluso con un brazo, soy más fuerte que tú.”
“No se trata de eso.”
“Hahh... hahh... Tu cara ahora mismo... parece que estás a punto de enfrentarte a la muerte.”
“————”
“Hay alguien esperando a que vuelvas con vida... ¿verdad?”
Desde atrás, escuché la voz de Ars.
“[¡No huyas———! ¡Si escapas ahora, probablemente correrás por el resto de tu vida! Si no te mantienes firme ahora, ¡¿cuándo lo harás?! Antes huiste de los Ojos Dorados... ¡¿perdiste a alguien importante, verdad?! ¡¿Vas a perder a alguien de nuevo huyendo?! ¡¿Dejando atrás al niño, el recuerdo de la persona que perdiste?! Quiero decir... ¿Qué pasa con ese monstruo con cara humana y Ojos Dorados... ¿Cuál es el problema? ¡Si lo mato, puedo hacerlo! ¡Ese Ojos Dorados con cara humana va a caer! ¡Lo mataré! Juro que lo haré... ¡Así que te dejo a mis compañeros y a los otros Ojos Dorados! ¡Mataré a ese! Lo mataré-——— ¡Mátalo, mátalo, mátalo! ¡Lo mataré!]”
Sus palabras sonaban llenas de resolución desesperada.
Tal vez eran las palabras que Ars había dicho cuando luchó contra un Rostro-Humano cuando era humano.
Gio miró hacia atrás para medir la distancia entre nosotros y Ars.
“Todavía estamos bien…”
“¿?”
“Cuando se trata de este tipo de cosas, los que esperan son los que más sufren.”
“¡......!”
“Así que, ¡no digas nada estúpido por el bien de los que te esperan!”
“… Lo siento.”
“Bueno... tener un fuerte sentido de responsabilidad no es algo malo.”
Sonreí suavemente.
“¿Qué pasa con eso?”
“Bueno… creo que escuché algo similar de Touka antes.”
“Sí, él diría eso.”
“¿…?”
“Puedo verlo decir eso perfectamente.”
Ya veo.
Puedo ver por qué Touka tenía una impresión favorable de este guerrero Leopardkin negro.
… Dicho esto, ¿qué deberíamos hacer?
La distancia entre nosotros se iba cerrando poco a poco.
Ars probablemente había dejado de intentar avanzar porque la brecha se estaba cerrando demasiado rápido.
Quizás pensó que a ese ritmo lo alcanzaría.
¿Debería soltar mis armas para aligerar la carga? No... Teniendo en cuenta que podría evolucionar a una velocidad sólo un poco superior a la nuestra... Es demasiado peligroso renunciar a armas que podrían ayudarme a defenderme en un combate.
También existe el riesgo de que nos lancen armas desechadas por la espalda.
Incluso ahora, no podría estar segura de cuándo la espada de Armia podría venir volando hacia nosotros.
Tal vez dejar caer mis armas vaya en contra del código del guerrero... Pero si yo dejara las “armas” que desechamos, él podría no dudar en usarlas...
Gio probablemente llevaba consigo su katana, cauteloso con eso.
Si ese no fuera el caso...
Sería mejor para ambos que me quedara con la Espada Mágica más ligera que tenía....
“Sirviente Divino... No sabía que podían ser tan problemáticos”, murmuró Gio irritado.
“Pero, la información que obtuvimos en nuestra lucha con Ars podría ser invaluable. Si por casualidad nos encontramos con un aliado capaz de derrotar a ese Sirviente Divino, al menos no tendrían que pasar por la misma batalla cuerpo a cuerpo que nosotros—— Y... tal vez, nuestra información sea la clave para la victoria.”
Me di la vuelta y continué.
“Definitivamente vale la pena dejarla pasar.”
Gio intentó hablar de nuevo.
Pero me llevé un dedo a los labios, pidiendo silencio.
“——Hay alguien más adelante.”
Y entonces aparecieron esas figuras.
Había cinco sacramentos de tamaño mediano.
Gio preguntó.
“¿Puedes encargarte de ellos?”
“No tenemos más remedio que hacerlo.”
Sin detenernos, los dos adoptamos una postura de ataque.
“Escucha, no dejes de correr... solo concéntrate en cargar—— cualquiera que falles sólo será arrastrado.”
“Comprendido.”
“———Vamos.”
Sin perder el impulso, ambos blandimos nuestras espadas mientras cargábamos.
Derribamos a tres de los cinco, y continuamos avanzando.
Pero…
Guh...
No era posible mantener la velocidad máxima sin frenar ni siquiera un poco.
Entonces, cuando me di la vuelta para ver a Ars, lo que vi fue——
“¡!”
Los dos Sacramentos que habíamos perdido, sus cuerpos desgarrados revoloteando por el aire.
“[¡No importa si eres enemigo o aliado! ¡No te interpongas en mi lucha! Uwooooohhhhh——–]”
La brecha con Ars se acortaba aún más.
A este ritmo———
Apreté los dientes y miré hacia delante.
Guh… ——, … Concéntrate.
De alguna manera…
“———, … Gio, ¡escucha con atención!”, grité, alzando la voz todo lo que pude.
“Reconozco este camino. ¡Estoy segura de que se divide adelante, a izquierda y derecha! ¡Nos dividiremos en dos y escaparemos! ¿¡Entendido!?”
“¡¿Huh?!”
“¡Es todo o nada! ¡Tenemos que unirnos con aliados que puedan luchar contra ese monstruo con la regeneración aparentemente interminable! De los que tenemos información sobre él—— ¡uno de nosotros tiene que decírselo! ¡La distancia a ese Sirviente Divino ya está por debajo de 20 reters! Pronto estará lo suficientemente cerca para golpear con su látigo. Si las cosas siguen así, nos alcanzará. Entonces, incluso si nos separamos... ¡uno de nosotros debe pasar la información que conseguimos luchando contra Ars! ¡Debemos aguantar!”
“Tú... ¿qué eres——”
“Primero—— ¡seguiremos adelante, atrayendo a Ars con nosotros! ¡Vamos!”
“——Tch, ¡bien! ¡Ya te lo dije! ¡Confío en tu juicio! ¡No me retractaré de lo que dije antes!”
“¡Tienes mi gratitud!”
Atravesamos el pasillo y salimos a un espacio más amplio.
Había otro pasaje más adelante en esta habitación.
Tal como lo recordé, se dividía hacia adelante.
Gio y yo, habiendo entrado en la habitación, apuntamos al camino directamente enfrente de nosotros.
Un poco retrasado, Ars también saltó a la habitación y comenzó a seguirnos.
“[¡ESPERAAAAAAAA——! ¡ESPERA UN MALDITO MINUUUUUUUUTO——!]”
Me di la vuelta.
Quizás porque habíamos estado corriendo tan duro.
*¡Thud!*
Incapaz de frenar a tiempo, me estrellé de espaldas contra la pared blanca de la habitación.
“¡Ugh...!”
◇◆◇
Mis oídos…mi audición.
Este es mi punto fuerte que quizás supera al de Gio.
Cuando luché junto a Ashinto y los soldados personales del duque Zuan——
Fue mi audición la que me permitió evaluar con precisión sus números.
Incluso en este laberinto, que amortigua los sonidos, si me concentro, puedo captar sonidos y presencias delante de mí.
Ese hombre también confiaba en mi oído.
Aparte de eso —— también está mi capacidad de sentir presencias.
Cuando luché contra Ars anteriormente, detecté rápidamente la aproximación de Gio.
Porque fui capaz de darme cuenta de “eso” con antelación.
La capacidad de comprender tal cosa.
Seguramente estos fueron regalos de mi padre y de mi madre.
Gracias a ellos pude “salir adelante” y darme cuenta de las cosas.
Además —— mi voz, cuando lo daba todo, estaba a mi alcance.
Yo también pude percibir eso.
Así que debería haber sido capaz de transmitirlo.
Esta vez, al contrario que antes con Gio, no era una voz alta para ahogar las cosas—— sino más bien, una voz alta para transmitir algo.
Incluí un “truco” en mis palabras para que Ars no se diera cuenta, pero——
Si es ese hombre...
Estoy segura de que lo captará.
Estoy segura de que lo aprovechará.
Estoy segura de que——
Tomará la mejor acción posible.
Eso es algo en lo que puedo confiar que hará.
◇◆◇
Mis ojos lo captaron.
La mujer de cabello plateado abriendo la boca...
“<Maldición Vinculante, Desatar>.”
La espada brillante de la Princesa Caballero, dando un paso adelante, desviando los látigos cuchilla que se acercaban.
Y viendo al hombre vestido de negro con ojos abrasadores...
Su brazo extendido se dirigió hacia Ars——
“<Paralizar>”
“Touka.” Grité el nombre del hombre.